CHAMPOHOUSTON REPORTE SEMANAL.
Por. Carlos Martínez Morano.
CHAMPOTON.-Escribir esto me ha
dado un dolor de cabeza terrible, primero porque he querido hacerlo desde hace días y no he podido, segundo la noche
que ya estaba dispuesto se presentaron otros inconvenientes y ya no me inspiré,
creo que todo lo que leí en el feis y en los títulos de los que escriben me orientó
a tomar una decisión.
No escribiré, mejor me dedico
al chisme y ya veré después que hago, pero bueno ya estoy en
pie y aunque me siento todo adolorido por los dos partidos de Sofbol que
jugué, ya estoy escribiendo, quiero decirte mi un lector
que no necesito ni de ningún tipo de
estimulante para inspirarme, solo es cuestión de querer hacerlo y empezar.
Ya encarrerado nadie me detiene, ni el coyote del correcaminos, así
que hoy me pongo a tus apreciables órdenes, con mi columna que tratara sobre un
tema que todavía me trae miope.
Y no es para menos figúrate mi
vacasionista un lector, el sábado de hace quince días, nos llego la noticia de que en los trabajos
que se llevan acabo en la zona costera, te estoy hablando de la segunda ampliación que
se hace en la Avenida Carlos Sansores Pérez, fueron suspendidos dizque porque se
encontraron varios esqueletos y calaveras de humanos.
Rápido y veloz, acudí a ver lo sucedido y en efecto, lo que las redes sociales circularon era
verdad, unos huesos habían aparecido en el lugar de los hechos y ahí, ya con todo y la denuncia, comenzaron a llegar; la Policía Municipal, los del Ministerio Publico, los del INAH y
los chismosos que nunca faltan en Champotón.
Quiero explicarte mi un
lector “Chuinero”, la semana que concluyó para ser exactos, el martes, dirigí mis pasos hacia el desayuno que
siempre acostumbro a realizar en la cocina económica de doña “Lety” antes de ir al desayuno y cuando me dirigía
al lugar de los comensales, vi a los
trabajadores del INAH que realizaban las excavaciones de los entierros
encontrados.
Así que sin mas, estacione a mi niña y me introduje al caño del
misterio, misterio porque no se sabe para que se tubo que hacer una especie de canal
en principio se pensó que pondrían alcantarillas para el desagüe pero ya vimos
que no, pero siguiendo con el relato,
pues que llego y que me dirijo
hacia una joven arqueóloga,
una guerita con carita de gringa muy guapa por cierto.
Y sin mas que le pregunto ¿Señorita seria usted tan amable de
concederme una entrevista? ¿Claro que si señor? Me contesto con mucha cortesía,
le conteste así, -bueno pues lo que la
gente quiere saber y tiene muchas dudas de todo esto de los esqueletos
encontrados, y primero, quiere saber si las tumbas encontradas son restos antiguos, segundo si encontraron
flechas y monedas de oro y tercero
si se trata de fosas clandestinas
o tumbas mayas?
-Ni una cosa ni la otra, me
contesto la joven, lo que tenemos aquí son ocho entierros, y no podemos
asegurar si son antiguos o se trata de
fosas clandestinas, pero por los rasgos
y lo que hemos visto mas bien quiero pensar que se trata de personas que fueron
enterradas clandestinamente, según se por la gente que ha comentado, aquí en esta área hubo un
lugar donde llegaba gente a tomar un
centro de diversión quiero pensar.”
-Lo que estamos haciendo, es tomar nota de los entierros, ocho para ser exactos y luego serán
llevados a los laboratorios del INAH de
la Ciudad capital para que se analicen y entonces se determinara de que se
trató, pero por el tipo de cómo están
enterrados pudiera tratarse de entierros clandestinos y no de tumbas mayas o
antiguas porque no hay ningún indicio que muestre la construcción de que por lo menos sea una tumba normal-
Esto de las excavaciones nos llevará tiempo, a lo mejor unos quince días lo que se retrasaran las obras de la
construcción del malecón.
-La gente dice que encontraron
Oro y algunas flechas de pedernal ¿Qué tan cierto es eso?
No, ni oro ni flechas, solo huesos y ahí están, tu los puedes ver cuando llegamos la
maquinaria ya había destrozado algunos esqueletos así que no se alcanzaron a recatar completos
solo uno.
Cuando dijo solo uno, ahí fue cuando le comente, bueno, me gustaría tomarle una foto, me contesto, -claro con todo gusto- mis pasos
los dirigí hacia uno de los entierros, ahí en uno de ellos, había un joven haciendo la limpieza del esqueleto,
lo hacia con una brocha de manera muy minuciosa, llamo mi atención porque estaba casi completo.
Mientras el joven realizaba su
trabajo, otra persona me dio una breve
explicación del hallazgo de los
esqueletos, diciéndome que el esqueleto que estaba completo, fue de una persona
adulta, un viejito diría yo, se veía completo
el esqueleto y parecía que su cabeza quedaba como inclinada hacia el frente,
como si al enterrarlo el hueco no fuera de
la medida de su estatura.
Lo observe por un momento y
luego decidí tomarle unas fotografías, lo que me sorprendió después de haberlo
fotografiado, no lo creerás mi un
lector, si, así como lo lees, tome
cuatro fotografías, dos sin flash y dos
con flash, en la ultima toma hice un comentario a los dos jóvenes -nada mas tomo esta no sea que se baya a
enojar el muertito-
Seguí mis pasos hacia la joven arqueóloga y observe que mi cámara
tenía un desperfecto, no aceptaba
la memoria interna…
Ya a la hora de querer ver las fotos me quede desconcertado turulato, miope, incrédulo, ¿Que crees mi un lector rumbero? las fotos que tome a la calaca ya no
estaban, ninguna, ¿Qué paso? No lo se, todavía
tengo esa duda por eso quise escribir esta historia, porque lo que me
sucedió con la calaca que no quiso fotografiarse en mi cámara es para Ripley. Uuuy que mello… cualquier cosa
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