En la cama y en la cárcel, los amigos de verdad.
Con cariño para doña Leonor "Doña Nochita"
Por. Carlos Martínez M.
Hospital General. de Campeche. |
Alguna vez oí la estrofa de una canción que dice “decía mi madre que en la
cama y en la cárcel, si te visitan son
amigos de verdad”
No puedo dejar pasar desapercibida
esta reflexión, estas palabras tienen mucho de cierto, el día de
ayer estuve en la ciudad de Campeche, para ser exactos en el Hospital general
de Especialidades, el motivo , la visita a doña “Nochita” la madre de mi esposa
y casi mía, digo casi por la deuda pendiente que tengo con ella.
Ayer y después de 12 días de
estar internada en el hospital, por fin parece ser que será intervenida el día
de hoy quirúrgicamente, de una caída que tuvo en su casa fisurándose su cadera.
El día que sucedieron los
hechos estaba en casa de mi madre cuando me hablo mi esposa comunicándome el
hecho, afortunadamente y gracias a que ya tenemos Cruz Roja, fue que pudimos
trasladarla al hospital para su valoración, y de ahí llevada a la ciudad de Campeche, las
consecuencias como ya dije fueron de pronostico reservado, fisura en la cadera.
Ayer por fin pude verla nuevamente,
ya ven ustedes como son en el hospital, no puedes tener visitas, solo en horarios forzados de cuatro a seis de la
tarde y si son muchos los visitantes tienes
que medir tu tiempo.
Total, ayer y luego de una semana de no verla, me apersone ahí, en la cama 340 donde antes de llegar, tuve que pasar por dos
aduanas bien custodiadas por sendos vigilantes que patrullan cada uno de tus
movimientos.
¿Por cierto, alguien me puede decir si esta prohibido enfermarse
en sábados, domingos y días festivos? Ayer
llegué al hospital, que a decir verdad
está muy bonito y bien grandotote, pero en estos días que menciono se
ve así, como un elefantote blanco. Opino
que debería haber el mismo movimiento los sábados y domingos y días festivos pues
muchos pacientes necesitan de los cuidados diarios y esos días no pueden
atenderlos porque el personal se encuentra de vacaciones. Ahí queda la
sugerencia ya no se diga los de nuevo ingreso.
Llegue y la observé, dormía
tranquila, toque su mano, y con la otra peiné el pelo cano que cubría su frente, por un
instante vino ami mente la imagen de mi tía “Elena” que ya no esta, que se
adelanto en el viaje. De sus lentes redondos se
abrieron sus ojos, una sonrisa y un abrazo, las lágrimas, mías.
Dije lo que le tenia que
decir, ahí inmóvil me comenta, ¿Cómo estas? ¿Como vas con tu azúcar? ¿Bien? -Me
he sentido mejor que nunca- la veo con mucho entusiasmo, -es la única manera que
puedo descansar, me tome unas vacaciones forzadas- la risa, la alegría en su
rostro, me quedo pensando, soy afortunado tengo seres que me quieren y se
preocupan por mi, aunque la adversidad se interponga.
Se que todo va a salir bien y
volveré a verla sobre sus pies, doña “Nochita” tiene la fortaleza de una mujer
luchona, todos la extrañamos en casa, se que muy pronto le devolverá la alegría a ese hogar donde ha sido la luz de su
familia, me despido de ella y me dice con un tono de entusiasmo, Dios me puso
mi penitencia en esta cuaresma y la acepto, el sabe porque lo hace, en el pongo
mi fe. El saludo y nuevamente el
despido, hoy será un buen día lo se, todo saldrá bien, si Dios así lo dispone
como dice mi suegra Doña Leonor, de
cariño “Doña Nochita”