Redacción Champohouston.
MÉXICO D.F.- El pasado lunes 12 de
abril del 2013, la Diputada Federal Lic. Elvia Pérez Escalante, fue invitada
como ponente en el Foro de Consulta con Presidentes Municipales organizado por
el INAFED en el marco de los foros de consulta para la Integración del Plan
Municipal de Desarrollo 2013-2018, con el tema “Igualdad de Oportunidades”
El evento contó con la presencia del
Secretario de Gobernación Lic. Miguel A. Osorio Chong, el Subsecretario de Gobernación,
Lic. Luis Enrique Miranda Nava, el Coordinador del INAFED Lic. Antonio Gonzáles
Curi, así como expertos de la academia, sociedad civil, presidentes municipales y
representantes de todos los partidos políticos.
Ponencia.
El Municipio, todos lo sabemos, es el
espacio donde la ciudadanía ejerce de manera original sus derechos políticos y
sociales al participar en la solución de sus problemas locales. Es decir, el
Municipio es el lugar básico donde debe darse este sistema de vida en el cual
las mexicanas y los mexicanos hemos de experimentar un constante mejoramiento
económico, social y cultural.
Sin embargo,
la agenda de retos pendientes en materia de equidad de género es enorme.
Las mujeres
contribuimos al desarrollo económico y social de distintas maneras, más allá de
aquellas que podemos desempeñarnos en un empleo formal. Inicialmente, las
mujeres trabajamos en el cuidado de la casa y de los hijos; ayudamos a renovar
la fuerza de trabajo remunerado; participamos también en la economía informal,
como medio de allegar recursos adicionales a la manutención de la familia y
realizamos labores voluntarias para resolver problemas sociales y comunitarios.
Aún con toda
esta aportación, las mujeres obtenemos solamente 10 por ciento de los ingresos
totales de la economía mundial, además de encontrarnos excluidas de la mayoría
de los proyectos sociales y de la toma de decisiones gubernamentales.
Particularmente
en nuestro país, aun cuando en 1953 se nos reconoció la calidad plena de
ciudadanía al obtener el derecho de votar y ser votadas, los avances en la
consolidación de nuestros derechos políticos y sociales han sido muy lentos.
Evidencia de
lo anterior es la baja presencia de mujeres encabezando ayuntamientos. En un
periodo de 25 años, es decir, entre 1986 y 2011, la proporción de mujeres al
frente de presidencias municipales pasó apenas de 2.9 por ciento a 6.9 por
ciento. Es decir, en un cuarto de siglo el avance de la participación femenina
en las alcaldías creció sólo cuatro puntos porcentuales.
Queda claro
que si el Municipio es la base de la organización política de la sociedad,
tenemos un gran rezago en asegurar una mayor presencia de las mujeres al frente
de sus gobiernos.
En este caso,
las mujeres estamos viendo vulnerados nuestros derechos políticos por nuestra
condición de género.
Este es
un problema de cuota, en el que los partidos políticos, como instancias
postulantes de candidatos a los gobiernos locales, no otorgan la suficiente
representatividad a las mujeres.
Es decir,
también en la política la contribución de la mujer es muy significativa. No
debiera nuestra condición de género ser limitante para acceder a una candidatura.
Por el contrario, hay entre nosotras mujeres con una profunda sensibilidad
social que nos da el contacto cotidiano con nuestros vecinos en la calle, el
mercado, la escuela, pero también con las suficientes capacidades y
competencias que nos da tener una carrera universitaria y haber desempeñado
cargos públicos y políticos.
El enfoque de
género en la gestión municipal permitirá de una vez por todas incrementar las
opciones reales de acceso igualitario a las oportunidades de desarrollo, lo que
permitirá romper las barreras culturales y redistribuir el poder entre géneros
y así lograr la equidad social.
La
perspectiva de género significa también una metodología de trabajo en contra de
la discriminación-subordinación y la posibilidad de establecer una nueva
relación de calidad entre el gobierno local y las mujeres, que privilegie su
identidad ciudadana, sus derechos humanos y su papel como actores estratégicos
del desarrollo local.
Con base en
ello, las propuestas son las siguientes:
* Incrementar
las candidaturas de mujeres en los partidos políticos para alcanzar, al menos,
el 40 por ciento de las alcaldías, y la mitad de otros cargos del Ayuntamiento.
* Dar mayor
participación en los Municipios a las mujeres para la elaboración de políticas
públicas, presupuestos y programas con perspectiva de género.
* Dar mayor
capacitación de los partidos políticos y los centros de desarrollo municipal de
los estados, a las mujeres en las habilidades propias de la administración y
gestión pública municipal.
Con estas propuestas,
estamos seguras de que avanzaremos hacia un México más justo y equitativo, un
México incluyente.